Desangrando (Maria Gabriela Micolaucich)

Vivía dentro de mi, picoteaba por dentro hambriento de libertad, aleteaba tentando mi propio vuelo, que nunca llegaba y cuando se agotaba para dormirse

leía pedacitos de la historia de mi alma, llorando hasta empapar sus propias alas y ahogar mis palabras.

Muda, triste, perdida llegué, llegamos, a la orilla sin playa de un mar nublado, de otro mundo sin nombre, y abriendo mi pecho dejé escapar a todo el dolor que me habitaba, desangrando el llanto, quebrando mis fuerzas en su propio equilibrio sin mi, dejando a mi deriva de un mar que manso observaba, querer sobrevivir.

M.G.M.